oíme...

+ es raro cómo recordamos sonidos. es decir, recordar colores, caras, cosas visuales, es relativamente fácil para nosotros. de hecho, al soñar, «vemos» cosas. pero en cuanto a sabores, por ejemplo, es mucho más difícil «recordar». uno recuerda, pero no puede reproducir el recuerdo, digamos. y entre estos dos extremos, en algún lado, parece caer el sonido. pero es raro.
me parece a mí, no sé si a otros, que creo recordar voces, pero no las puedo evocar, reproducir. sé qué si alguien con quien no hbalo hace mucho me llama, voy a reconocerle la voz (o al menos eso creo al pensarlo), pero no puedo «escuchar» esa voz, exactamente así. podría reconocerla, perop no producirla. bueno, eso no parece tan raro, yo puedo reconocer a la giuconda, y no producirla. salvo que, por ejemplo, yo puedo en mi cabeza, reproducir sin problemas canciones, con varios instrumentos, con notas, con tempo, con timbres, con sonidos, con letras... pero la voz de alguien con quien no hablo hace mucho, tal vez no puedo generarla.
claro que con la música es algo especial, también, porque recordás algo armado. tal vez si hablamos de una frase que una persona decía mucho, tal vez sí puedas tener un registro, como si le dieras play a un pequeño registro. pero generarla, no sé, no...
es raro también que al leer, por ejemplo (al pensar también) «escuchamos» una voz. pero esa voz, y por eso las comillas, en realidad (más allá de la obviedad de que no existe) no tiene un sonido en particular, ¿te diste cuenta? es como si fuera tu voz, pero en realidad no suena como tu voz, suena como si en realidad no sonara nada, pero ahí está. como quienes tienen dolor en un miembro que no tienen, esas cosas, no? locuras del cerebro...